domingo, 5 de junio de 2011

¿Cómo motivar a nuestros alumnos?

Las avances recientes en neurociencias confirman lo que intuitivamente todos sabemos: se aprende más cuando se disfruta. Las emociones positivas favorecen el desarrollo de las conexiones neuronales y estimulan procesos de aprendizajes. ¿Comprendemos las implicaciones de este hecho? Se trata de que la variable motivación debe ser un componente transversal de todos nuestros diseños educativos. Planear una buena clase significa plantearse en todo momento cuál es la estrategia motivacional que incorporaremos.

Dado que la motivación es una resultante de factores múltiples, se pueden hacer varias sugerencias para conseguir que nuestras clases sean motivantes. En primer lugar, está el factor ambiental. Un entorno agradable es necesario no solo para evitar distractores, sino para condicionar la atención enfocada y para estimular positivamente.

El entorno humano es otro condicionante. Cuando el docente diseña tareas auténticamente cooperativas, el estudiante recibe a través de sus pares un ambiente rico en estímulos, aprende el trabajo en equipo y recibe retroalimentación continua.

La actitud del docente influye decisivamente sobre la motivación del estudiante. Conocemos el efecto Pigmalión: las expectativas del docente actúan como profecías autocumplidoras influyendo sobre las capacidades del estudiante. El docente que cree en sus alumnos les induce a creer en sí mismos. Más aún, el docente actúa como modelo para el estudiante en sus actitudes hacia el saber, de modo que un maestro enamorado de su materia es quizás el medio más eficiente para que el alumno quiera aprender.

Las variables instrumentales son indispensables. Ahora que la tecnología pone recursos poderosos a manos del docente, pueden diseñarse tareas, actividades y evaluaciones que sean experiencias ricas y más acordes con el estilo de aprendizaje de nuestros alumnos, auténticos nativos digitales que han permeado su vida y su forma de aprender con aparatos electrónicos. Una ventaja adicional de las nuevas herramientas tecnológicas es que permiten diseños de aprendizaje personalizados y el avance del estudiante a su propio ritmo y necesidad.

Consideración especial merecen las variables cognoscitivas. Viktor Frankl acostumbraba a citar la frase “cualquiera puede un cómo si tiene un por qué”. Si un estudiante comprende los objetivos de aprendizaje y su razón de ser, puede integrar más fácilmente los nuevos conocimientos. Si lo desconoce, ante el sinsentido de lo que se le enseña responderá con apatía, indiferencia e incluso hostilidad. Si el alumno puede construir vínculos entre el conocimiento nuevo y el previo, la asimilación resulta más agradable. Si el educando puede crear y construir por sí mismo, su aprendizaje será sólido y permanente. De allí que el constructivismo se convierte en un modelo adecuado y eficiente como contexto para el desarrollo de una actitud positiva hacia el conocimiento. Y es un paradigma que respeta el estilo de aprendizaje individual, facilitando así el aprendizaje en vez de forzarlo.

El estudiante proactivo, es decir, capaz de motivarse a sí mismo para aprender, es el resultado de un proceso educativo en que el docente transfiere progresivamente al educando la responsabilidad y el control del proceso. El andamiaje significa ir ajustando las tareas de forma progresiva para que el estudiante pueda avanzar hacia su zona de desarrollo próximo, de modo que se le estimula a crecer conforme a su propia capacidad. La sensación de la autonomía creciente, el desarrollo de la metacognición y las nuevas habilidades de autorregulación son factores para generar una motivación permanente. Deben, por tanto, ser la meta de nuestros diseños educativos.

En conclusión, podrá observarse que esta propuesta multifactorial de la motivación exige repensar el modelo educativo vigente, en donde aprendemos… ¡a pesar de la escuela!


12 comentarios:

  1. El papel del docente en la motivación es esencial, pues este debe ser el incitador a partir de estrategias adecuadas a ellos.

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  2. Alex,
    Es cierto que se debe transferir progresivamente la responsablidad del autoaprendizaje al estudiante, para no brincarnos ninguna etapa de la adquisición de técnicas para tal fin. Creo que debería existir un proceso igualmente progresivo para que los alumnos también puedan construir los instrumentos necesarios para conseguir los motivos correctos para su proceso de enseñanza y aprendizaje.
    Por otra parte, si mal no recuerdo, la zona de desarrollo próximo se aplica a los niños en las primeras etapas cognitivas o en caso de niveles bajos de maduración; por lo que creo que no hay forma de aplicarla a adultos ya con capacidades metacognitivas.

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  3. Estimado Jorge:
    La zona de desarrollo próximo es definida por Vigotsky como "the distance between the actual developmental level as determined by independent problem solving and the level of potential development as determined through problem solving under adult guidance, or in collaboration with more capable peer ("Mind in Society: Development of Higher Psychological Processes, p. 86). Ya que el desarrollo cognoscitivo prosigue a lo largo de la vida, como han indicado Piaget y otros, este concepto es suficientemente general para ser aplicado también a adultos.

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  4. Hola Alex, me gusta tu artículo consideras varios factores importantes como elementos de motivación que no estan fuera de nuestras manos el realizarlos si así lo queremos, para mejorar el desarrollo de nuestros estudiantes.
    Me parece muy buena tu idea del ultimo parrafo donde comentas lo de un desarrollo permante, esto es basicamente lo que todo docente debería impulsar en un estudiante, ese es parte de la madurez de el como persona y profesional.

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  5. Muy bien, Don Alex.
    Consideró diversos elementos que pueden lograr la motivación en los estudiantes.
    Cabe señalar, que la labor del docente no es muy fácil pues lo que motiva a un estudiante, no motiva a otro. El aprendizaje toma en cuenta los conocimientos previos, sin embargo lo que sabe un estudiante, no lo sabe otro, por lo tanto los factores que influyen en la motivación es único e individual.

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  6. muy buen artículo, es muy importante mantener a los estudiantes motivados...

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  7. Don Alex, me llama la atención un punto súper importante que usted toca en el artículo, y precisamente el grado de influencia que posee la actitud del docente. Muchas veces nos enfocamos en factores externos, para analizar posibles distracciones al proceso de aprendizaje, y olvidamos el monitorearnos de forma constante a nivel personal. Muy acertado y muy correcto.

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  8. Estimado don Alex

    Desde mi perspectiva, la motivación en clase depende no sólamente del estudiante si no del profesor también.
    Como usted menciona, nuestra actitud en clase puede marcar una diferencias clara en cuanto a la motivación extrínseca de los estudiatnes. Si "no nos gusta el curso que estamos dando", si no nos gusta "el grupo que tenemos" y si no estamos nosotro mismos motivados intrísecamente; difícilmente lograremos transmitir entusiasmo a nuestros estudiantes.
    Además, los recursos tecnológicos están a disposición de todos. Debemos sacarles el mayor provecho con el fin de no sólo motivar a nuestros estudiantes, sino también, lograr que ellos utilicen y desarrollen tantas habilidades ocmo sean posibles.

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  9. Hola Alex,
    En tu artículo citas el andamiaje, y quería hacer énfasis en este concepto, ¿Te diste cuenta de que el andamiaje pre-supone que el alumno esta aprendiendo a "Hacer" algo (de forma práctica) y no solo a saberlo (de forma teórica)?. Creo que esta propuesta de Vygotsky ya traía la idea de que una de las mejores formas de aprender es haciendo, y para efectos del tema de esta semana, la motivación, creo que cuando el alumno se da cuenta de que SABE HACER algo, su motivación por participar activamente en el proceso aumenta.

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  10. Estimados compañeros:
    Coincido plenamente con sus indicaciones. Un docente es un facilitador: esto significa que pone al servicio del estudiante conocimientos, materiales y actividades diseñadas para lograr los fines de aprendizaje. Como mediador pedagógico, facilita el acceso a la información y guía en el desarrollo de estrategias para procesarlas. Y lo difícil de su tarea es poder hacerlo sin imposiciones al estudiante ni suplantación del trabajo que el alumno debe hacer por sí mismo. Debe ser promotor de la actividad del estudiante, que debe ser el centro del proceso. Ese equilibrio entre un diseño sumamente activo por parte del docente y una ejecución del estudiante permiten complementarse para alcanzar un proceso de aprendizaje exitoso.

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  11. El rol del docente en la motivación del estudiante juega un papel importante, especialmente si este se siente motivado al impartir su lección. Creo que un docente motivado puede inspirar a muchos estudiantes y alcanzar un objetivo que es el que sus estudiantes aprendan.

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  12. Alex

    Me agradó mucho tu ensayo, y creo que existe un replanteamiento por parte del estidiante también. Bien lo dices, el equilibrio es importante y el docente aunque debe ser el promotor y centro del proceso, no puede actuar solo.

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